Para resumir un poco los 2 días en Killarney se podría decir que ha sido sobre todo: …lluvia, niebla, algo de sol por las tardes, caminatas canceladas (incluida la montaña Torc), ruinas prehistóricas, cuervos, península Dingle, cenas copiosas, gaviotas, burros, ‘Wild Rover’ y muchos pero que muchos kilómetros en el coche.
Típico tiempo irlandés...como debe de ser, otra cosa sería dececpcionante
ResponderEliminarQue bonito debe ser el pasear en tardes de verano en la acogedora soledad de esos verdes prados, notar la brisa en la cara, las gotas de fina lluvia incluso; poder disfrutar de un tentempié mientras el tiempo pasa, relajado, sobre la húmeda tierra; el poder tenderse en la hierba en infinita libertad y disfrutar del roce de las briznas por todo el cuerpo... Y supongo que más o menos eso mismo debió pensar también JB...
ResponderEliminarAy que lindooo el burrito!!!
ResponderEliminar;P
Besos
Yai